Regeneración de bosques y tierras agrícolas en la Sierra Gorda de México

Resumen

Los bosques cubren más de un tercio de la superficie terrestre de México. Estas tierras proporcionan importantes beneficios culturales y ecológicos, ya que los bosques mexicanos contienen la décima parte de la biodiversidad mundial. Estos son además la fuente principal de sustento y oportunidad comercial para las comunidades locales que los poseen. Entre 1990 y 2005, México perdió alrededor del 7% de su cubierta forestal (aproximadamente 4.7 millones de hectáreas) debido a la conversión de zonas forestales en zonas agropecuarias y ganaderas.

Las tierras dedicadas principalmente a la ganadería cubren una superficie similar. Su mala gestión puede resultar en la emisión de gases de efecto invernadero (GEI) del ganado y de la degradación de los suelos. Sin embargo, con una gestión territorial regenerativa, las tierras de pastoreo pueden hacerse más rentables, y convertirse en fuentes importantes para la reducción de emisiones GEI.

La necesidad de apoyar oportunidades económicas para las comunidades rurales de México, y a la vez conservar sus bosques, ha llevado el Estado de Querétaro a promover una iniciativa para reverdecer México a través de la promoción de prácticas regenerativas de gestión territorial. El estado ayuda a proporcionar incentivos fiscales a las comunidades que remueven el ganado de sus bosques y adoptan practicas regenerativas en sus ranchos. Los pagos son financiados a través de los ingresos recaudados de un impuesto al carbono que el estado ha aplicado a vehículos privados, y que la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR) iguala en una proporción de uno a uno.

Además de la restauración forestal, el proyecto también capacita a los técnicos, estudiantes, y productores ganaderos en prácticas de gestión territorial regenerativas como el “diseño hidrológico del terreno” (diseño Keyline) y el “pastoreo holístico planificado”. En asociación con la Secretaría de Desarrollo Agropecuario del Estado de Querétaro (SEDEA), se han tomado medidas claras para incorporar estas actividades en la agenda de políticas públicas, para que las prácticas de regeneración de suelos sean institucionalmente reforzadas.

Los directores del Grupo Ecológico Sierra Gorda (GESG) están trabajando con grandes ranchos que cumplen con los criterios necesarios para generar créditos de compensación de carbono. Las metodologías desarrolladas a través del proyecto para el monitoreo del secuestro de carbono en ecosistemas forestales, y las herramientas para la adaptación pueden ser aplicadas en otros estados de México y al nivel internacional, y están disponibles a solicitud.
Resultados
Si bien el proyecto apenas está en marcha, proyectos pilotos para los dos componentes de restauración de bosques y pastoreo planificado han sido completados con éxito. La restauración de bosques a través de “pagos por servicios ambientales” ha sido implementado durante varios años en los bosques de encino antiguos de la Sierra Gorda por GESG en asociación con Bosque Sustentable
A.C. (BSAC), y actualmente proporciona pagos para la preservación de aproximadamente 6 mil hectáreas cada año. Igualmente, el componente de pastoreo planificado empezó como un proyecto piloto en aproximadamente 82 mil hectáreas en los estados de Querétaro, San Luis Potosí, Chihuahua y Sonora.
Si se amplían estas actividades, incluido crecimiento en los estados actuales y replicación en otros estados mexicanos, GESG estima que el componente de restauración forestal restaurará 338 mil hectáreas, reduciendo las emisiones GEI de México en un 2.5 millones de toneladas métricas en un periodo de cinco años, y el componente de pastoreo planeado regenerará 788 mil hectáreas, reduciendo 7.2 millones de toneladas métricas durante cinco años.
Anecdóticamente, los ganaderos de la Sierra Gorda dicen que su participación en los proyectos pilotos, incluyendo la capacitación por GESG, han aumentado sus ingresos y mejorado la salud general de sus ganados.

Desafíos
Según Martha “Pati” Ruiz Corzo, directora y cofundadora de GESG, uno de los principales retos del proyecto fue al principio asegurar financiamiento a través de protocolos globales, que no se correspondían con las realidades locales y cuya implementación era costosa. La solución fue trabajar directamente con el Estado de Querétaro para conseguir los financiamientos requeridos y también ayudar a cumplir los objetivos del estado, tales como la compensación de emisiones GEI del parque automotor del estado.
Lecciones aprendidas
• El suministro de incentivos económicos a los propietarios a través de un modelo de “pagos por servicios ambientales” es una de las claves del éxito del proyecto. Sin estos incentivos económicos, es comprensible que los propietarios busquen otras oportunidades comerciales para su tierra.
• El monitoreo, reporte y verificación fiable de las reducciones de emisiones GEI resultantes del proyecto es igualmente crítico. El protocolo local utilizado en el proyecto se está actualmente validando por la Iniciativa para la Transparencia en la Acción Climatica (ICAT) como pionero de transparencia en las políticas públicas.
• La incorporación de herramientas para la regeneración de suelos y bosques, como el “pastoreo holístico planificado” puede aumentar la productividad ganadera, la producción alimentaria sana, la regeneración territorial, y la biodiversidad. El compromiso cívico regular también ayudo a obtener la aceptación de comunidades rurales.

Más información

Para obtener más información sobre el proyecto, consulte aquí.

Para obtener más información sobre el Grupo Ecológico Sierra Gorda, consulte aquí. Contacto: Martha “Pati” Ruiz Corzo, directora, Grupo Ecológico Sierra Gorda, sierragordareserve@yahoo.com